A parte de estos paisajes otro punto a favor es que en todas las estaciones del año hay algo interesante que hacer o ver a parte de relajarte, que hace de la zona un lugar de continuo flujo de turismo, pero no masificado. Primavera con todo florecido, verano para disfrutar de sendas, pozas y buen tiempo, otoño perfecto para turismo fotográfico e invierno para la gente que busca montañismo invernal en Sierra Nevada.
Es un área muy grande y con carreteras pequeñas que dibujan siluetas de infarto en las laderas de las montañas que junto a la cercanía de Granada, hace que también sea zona de paso de un solo día para mucha gente. Visitar los pueblos más famosos, unos cuantos kilómetros de curvas y comer su embutido, es lo que se suele hacer en una visita rápida.
Nosotros visitamos esta zona en un mismo viaje en el que primero pasamos la Nochevieja en el refugio Pokeira y subimos al Mulhacén el día 1, después visitamos La Alpujarra, y por último pasamos unos días en Granada.
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PUEBLOS EN LA ALPUJARRA
Es imprescindible nombrar los pueblos ya que son uno de los atractivos de la zona, pueblecitos blancos encalados en las montañas en pleno barranco, carreteras perfectas para marearse (hay que decir que la mayoría están bien asfaltadas, e incluso con una calzada ancha), desniveles enormes que hacen encontrar miradores allá por donde vayas. Hay más, y posiblemente igual de bonitos, pero solo voy a nombrar los que visité, que son los más famosos de la zona.
Lanjarón
Es el primero que te encuentras por la carretera y os recomiendo que lo visitéis en primer lugar, ya que para mí, no tiene punto de comparación con el resto. Además en invierno está casi todo cerrado, incluso la oficina de turismo ya que todo está orientado al turismo de balneario que comienza hacia la primavera.
Un punto interesante de la población es la cantidad de fuentes que hay repartidas por todo el pueblo, casi igual de numerosas que las Hornacinas, todas dedicadas a infinidad de Santos. Las hornacinas se colocaron allí en la época de la reconquista de los cristianos sobre los musulmanes, demostrando así el dominio cristiano en los terrenos conquistados.
La parte más bonita la encontramos en el barrio del Hondillo y en la calle con el mismo nombre que comienza desde la Plaza Constitución y por la cual te adentras en el barrio.
Pampaneira
Antes de entrar a Órgiva, quizás la población más grande de la zona y que no dice mucho, sale una carretera dirección Pampaneira y Trevélez que recorre el barranco de Poqueira. Pampaneira es el primer pueblo que te encuentras y que destaca por su belleza conforme te vas acercando a él por la carretera. Todas las casitas blancas, calles empedradas y peatonales, miradores hacia la ladera, y lleno de tiendas de artesanías donde destacan las famosas jarapas (alfombras) y bares para recibir al turismo.
También destaca la tienda y museo del chocolate, famoso en Pampaneira por su fabricación casera.
Bubión
Dirección Trevélez, hacia la izquierda hay un desvío que te lleva a Bubión y Capilerira. Bubión es el primer pueblo que te encuentras. Al igual que Pampaneira, pueblo muy bonito, calles estrechas y bares por doquier, perfecto para descansar y perderte por sus calles y sendas cercanas. Aquí hicimos una boche cuando bajamos del Mulhacén en el hostal Casa Iberos, nos gustó mucho por el ambiente de tranquilidad que se respiraba allí, aunque no pudimos disfrutarlo ya que fuimos a dormir y al día siguiente nos fuimos pronto. Desayuno muy bueno, con productos que cultivan allí y la dueña se encarga de hacer compotas y mermeladas, también las vende.
Si repetimos por la zona seguro que nos volveremos a alojar allí.
Capileira
Creo que es el que más nos gustó, quizás también le dimos más tiempo. Es el último pueblo de la carretera, el más alto y por lo tanto las vistas del valle son geniales. Al igual que en los anteriores, pasear y perderte por sus calles, disfrutar del sol en sus plazas y terrazas es un lujo, tranquilidad y relax fue lo que encontramos. ¡¡Y unas buenas migas alpujarreñas!!
Pórtugos
Retomamos la carretera que viene desde Órgiva dirección a Trevélez, y antes nos cruzamos con este pueblo. De Pórtugos no puedo decir mucho, lo único es que una vez superado el pueblo nos encontramos con la Fuente Agria, una serie de caños donde el agua que sale tiene un contenido altísimo en minerales, sobretodo hierro, y que dicen que el agua de cada caño sabe diferente. Lo que está claro es que tiene un sabor muy fuerte, como si bebieses hierro líquido. Es tanta la concentración del mineral, que tanto en los chorros como en la cascada que hay al otro lado deja un rastro de óxido. Si llenas una botella y dejas pasar unas horas podrás ver el poso de minerales que deja.
Trevélez
Dicen que es el pueblo más alto de España, yo no lo he comprobado pero su situación a casi 1500 metros de altitud lo hace muy posible. Se ha hecho famoso sobretodo por el jamón de Trevélez, una denominación de origen que no se basa en el cerdo, ya que lo traen de Aragón en su mayor parte, sino en la forma de curarlo.
El pueblo está dividido en 3 barrios con 3 entradas diferentes para los coches, porque el desnivel es importante entre ellos. Es como los anteriores muy bonito, todo lleno de casas blancas y callejones estrechos, aunque algo más grande y con bastantes empresas.
Desde allí salen muchas rutas de senderismo, puedes pescar en el río, probar su embutido y adentrarte en Sierra Nevada.
